13 de septiembre de 2013

La vida del emigrante

Llevo apenas 10 días viviendo en Alemania, y acabo de leer este artículo en El País, que me ha encantado. Es de un español que vive en Alemania desde hace 6 años, y creo que merece la pena leerlo si alguien está pensando en emigrar, aquí o a cualquier otra parte.

Aunque llevo muy poco tiempo en Alemania, dónde hemos venido con intención de quedarnos "para siempre", mi instinto me dice que lo que cuenta este hombre es la vida misma del emigrante.

A ver si me estabilizo un poco, porque ahora mi casa y mi vida en general son bastante caóticas, y os empiezo a contar cosas, que hay mucho que merece la pena.

El artículo está aquí: "Desintegrándome en Alemania", aunque lo copio y pego a continuación:


Diego Ruiz del Árbol reside en Berlín desde 2007. Actualmente dirige “Berlinerds”, su propia agencia de programación web y gestiona el portal berlunes.com, creado por él mismo en 2009. El lema del portal es: “Ellos tienen Mallorca, nosotros tenemos Berlín”.
“Nací en Madrid hace 33 años donde, tras una larga carrera universitaria, me convertí en Ingeniero en Informática. Desde hace seis, vivo y trabajo en la capital de Alemania. Mi historia cuadraría bien en la famosa fuga de cerebros, pero esa no es la realidad. Aterricé en Berlín poco antes del comienzo de la crisis, atraído por el magnetismo de la ciudad y en busca de aventura. Seis años después he conseguido todo lo contrario; mujer, hijos, coche familiar, hipoteca y empleo estable. Se puede decir sin lugar a dudas que he fracasado.
Al llegar conocí a un chico que llevaba en Berlín varios años y que siempre se rodeaba de españoles. Le pregunté por su integración y me dijo una frase que no olvidaré: “Yo estoy ya en fase de desintegración”. Con el tiempo he comprendido que aquel chico sabía de lo que hablaba.
Cuando llegué a Alemania mi preocupación era integrarme. Quería aprender el idioma, hacer amigos alemanes y no juntarme con españoles. Con el paso de los años, el idealismo inicial fue sustituido por la cruda realidad. Para los mortales como yo, hablar alemán perfectamente es una tarea que lleva toda una vida. Los alemanes no son tan sociales como los españoles y su amistad se “vende” más cara. En principio relacionarme con españoles fue una necesidad, para no tener que quedarme los fines de semana en casa.
Pese a las dificultades, mi integración ha ido progresando adecuadamente. Mi alemán no es perfecto pero es suficiente para comunicarme sin ayuda de la mímica y al menos tengo tres o cuatro buenos amigos alemanes.
Lo que no he conseguido aún es no sentirme español en Alemania. Que nadie me malinterprete, no hablo de discriminación. Me refiero a que hay veces que me apetece juntarme con gente que entienda mi humor absurdo sin necesidad de aclaraciones. A veces deseo tener una conversación insustancial o quiero dejarme llevar en una noche de copas y risas donde no haya que planear más que “dónde tomamos la siguiente”. Esto, por norma general, funciona mejor con los sureuropeos que con los alemanes. Me temo que también yo he llegado a la fase de desintegración, que no es más que la búsqueda de la propia identidad en el país ajeno.
Pero aquí no acaba la cosa. Desde que vivo en Alemania me siento raro también en España. Mi familia dice que me estoy alemanizando porque me molestan los gritos de la gente por las abarrotadas calles de Madrid. He dejado de preocuparme por si me roban el móvil o la cartera. No trato de colarme en el supermercado y me molesta cuando alguien lo hace. Involuntariamente he empezado a pensar que la gente respetará las reglas. Y es que, aunque tiene inconvenientes, la cultura alemana también tiene grandes ventajas.
Otro de los debates que mantengo habitualmente en España es el tema de “la Merkel” y su política de recortes. Mis amigos me interpelan como si fuese yo mismo quien decreta la subida del IVA o la flexibilización del despido. Yo les juro que, aunque viva en Alemania, Merkel aún no me consulta sus decisiones.
Algo que defiendo siempre de Alemania es el tratamiento de los casos de corrupción. Cuento a mis amigos que el Ministro de Defensa Karl-Theodor zu Guttenberg dimitió al demostrarse que había copiado algunos párrafos en su tesis doctoral. O que Christian Wulff, presidente de la república, dejó su cargo por unos supuestos créditos obtenidos en condiciones ventajosas. Mis amigos me miran incrédulos. Sospecho que no me creen.
En España lo de la corrupción es diferente. Recientemente se ha descubierto que la cúpula del partido en la presidencia habría recibido dinero negro de importantes empresarios a cambio de decisiones políticas desde 1990. El escándalo está perfectamente documentado por el extesorero del partido. El presidente del Gobierno despacha el asunto con un “Todo es falso, salvo alguna cosa”, mientras manda mensajes de texto al señor en cuestión diciéndole “Ánimo Luis, sé fuerte. Hacemos lo que podemos. Un abrazo”. Y ya está.
En mitad del crudo invierno alemán suelo pensar en regresar junto al calor de mi familia pero, cuando me doy cuenta de que tendría que convivir a diario con ese podrido sistema, siempre acabo posponiendo la vuelta un par de años más.


22 comentarios:

  1. Gracias por postear este artículo. Me ha gustado leerlo. He coincidido alguna vez con este chico aunque no le conozco personalmente.
    Hay mucho de verdad en este artículo, pero no estoy deacuerdo en el último párrafo. España no es un sistema, es un país con su gente, y quiero creer que esta crisis es una evolución para el despertar de la gente y para acabar de una vez con toda esa corrupción. Es hora de que las nuevas generaciones que están superpreparadas sustituyan a todos estos corruptos, y levanten el país. España es un país con un enorme potencial!
    Besos y buen finde!

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    1. Mundeola, mi problema es que yo ya no creo en este sistema, por eso me he marchado. Quizá influya mi edad en el hecho de dejar de creer, en pensar que lo de España es un problema en gran parte cultural, y en sentir que "se me acaba el tiempo" para un cambio. Es complicado. Sí que tengo claro que España está llena de gente con unas ganas de trabajar y un potencial enormes, pero muy mal dirigidos tanto por políticos como por una gran parte de los empresarios. Y así es muy difícil que haya un cambio drástico, como no sea cortando cabezas como en tiempos de la revolución francesa.
      Besos!

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    2. Su, he leído todos los comentarios. Intenta conocer gente y formar un grupo de amigos con los que te sientas agusto. esto vá a ser un gran apoyo. Hay muchos foros o páginas de facebook de gente que se encuentra en una situación similar a la tuya. Yo llevo muchos años aquí, y la verdad es que también me dan momentos bajos. Por suerte tengo un buen grupo de amigos, que casi son también familia. Un besito y mucho ánimo!

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    3. Mundeola, gracias :). Tengo una buena forma de conocer gente, y es a través de la guardería del pequeño. Es una "Elterninitiative", de esas en las que ayudas, seguro que sabes de lo que hablo. De hecho, esta mañana me la he pasado allí y la gente era muy maja. En el colegio del mayor también me he apuntado a ayudar en el comedor algunos días, y tengo un par de "amigos de amigos" que viven aquí, y con los que ya he contactado. Además, me gustan mucho los idiomas y aprender alemán lo mejor posible va a ser una de mis prioridades, así que en lo que se refiere a amigos/conocidos, por muy cerrados que sean los alemanes (que tampoco creo que sea para tanto, no se...), creo que me apañaré bien. Os iré contando. Un beso!

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  2. Bueno, Su, a ver si es verdad que las cosas desde lejos se ven mejor.
    Aquí seguimos enfangados y sin salida.
    Besos.

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    1. Blue, pues no sé, la verdad. Las cosas desde aquí se ven de otra manera, se nota que se vive mucho mejor, ya os iré contando, pero yo ahora mismo lo cierto es que siento una gran tristeza por estar lejos de mi familia, así que no sabría decirte...
      Muchos besos.

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  3. Supongo que si estás en un sitio donde la gente es correcta, honesta y hace lo que tiene que hacer, cuando miras hacia este país, se te quitan las ganas de volver.
    Pero es que si todo el mundo saliera de aquí por patas, ¿en qué quedaría España?

    Estoy segura de que esto, tarde o temprano, tiene que mejorar. Que los corruptos se vayan a tomar viento de una vez porque la gente decente se ha cansado y ha empezado a moverse.
    Espero que sea más pronto que tarde, porque si no...

    Un beso Su!

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    1. Lourdes, eso digo yo muchas veces, cuando me dicen "qué valiente por irte". Sí, valiente sí, no es fácil, pero siempre digo que en realidad "salimos huyendo". Yo lo hago pensando casi más en mis hijos que en mí misma, pero pienso muchas veces que España va a tener a este paso un grave problema social dentro de unos años como esto siga así.

      Ojalá tengas razón y esto mejore, porque de lo contrario no sé qué puede pasar. Las cosas medio funcionan porque las familias se ayudan mucho entre sí, pero eso no puede durar eternamente. En fin, veremos...

      Un beso fuerte.

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  4. Venga Sue, ya lo has hecho,con un par, ahora a apretar los dientes y a pelear para lograr lo que os habéis propuesto, no es fácil pero lo lograrás, hace años, ya en un pasado lejano, yo lo logré, pero recuerda esto muy bien, es un dicho venezolano muy inteligente, "Como no soy río, me puedo volver atrás", y no te hablo de fracaso, no, estoy seguro de que saldrás adelante, si lo hacen los alemanes, aunque para ti sea mas difícil, ¿porque no lo vas a hacer tu? la vida y las metas cambian, en ti, ahí y aquí, todo tiene sus pros y sus contras, si en unos años haces balance y no te satisface el presente, pues te vienes y se acabó, no tienes que dar cuentas a nadie, y mas si has triunfado, aunque todo es muy relativo y las cosas se ven con otras perspectivas, pero ahora te deseo lo mejor y saborea el nuevo mundo que tienes por delante, es como hay que tomarlo, sin hacer comparaciones, es otro mundo, esto te queda a la vuelta de la esquina :))
    ¡Mucha suerte guapa!
    Besos y salud

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    1. Da gusto leer a Genín, se le puede aplicar eso de que la vida ha pasado por él. Sabe.
      Y el dicho me lo quedo.

      Besos.

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    2. Genín, Blue ya casi ha respondido por mí :).

      Hoy es que estoy un poco de bajón (bueno, más bien un mucho), porque vinieron mis padres unos días con nosotros para echarnos una mano, y se han marchado hoy. La despedida, sobre todo de mi madre, ha sido muy dura, y eso que llevaba preparándome desde hace meses. Pero tengo claro que esto es un duelo que hay que pasar, y que pasará, y en realidad veo esta nueva etapa con ilusión por mil razones. De lo contrario me habría quedado en casa, seguro. Y sé que lo voy a disfrutar, seguro, y mucho, y si no me gusta no sé si volveré o me iré a buscar un sitio nuevo, porque una vez has puesto el pie fuera de casa, cambiar de sitio seguro que cuesta mucho menos.
      Si no me falla la memoria, cuando comenté por primera vez en el blog que nos queríamos marchar, me dijiste que lo pensara bien porque al final acabas no siendo (o no sintiéndote) de ningún sitio, no recuerdo exactamente cómo lo escribiste, pero la idea se me quedó. Lo que cuentan en este artículo es en parte eso, y creo que va a ser así, aunque tampoco lo veo como un drama.
      En fin, que al final te he soltado un rollo! Muchas gracias por tus palabras, de verdad :). Un beso.

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  5. Si Sue,tienes buena memoria esa es la parte mas negativa de la inmigración, pero ocurre después de años, al menos lo que a mi me ha sucedido, incluso a pesar de los años que han pasado, a veces, le tengo que preguntar a mi vecino o a cualquier amigo, cosas tontas, como se llama aquí una azada, por poner un ejemplo sencillo, incluso a la hora de expresarme, aquí mismo,comentando, a veces tengo dudas de la expresión correcta a utilizar para comunicarme coloquialmente, no te lo voy a ocultar, yo soy totalmente contrario a emigrar, pero claro no se puede quedar uno con los brazos cruzados,sin futuro, y ahora, una vez de que lo habéis hecho, no hay que mirar atrás, ver el lado positivo y salir a comerse el mundo disfrutando de lo excitante de vuestra situación,que lo hay y mucho, por otro lado estáis en Europa, las visitas son posibles, las nuevas tecnologías con Internet os facilita mucho las cosas, no cabe duda de que en mi época fue mucho mas duro, yo estaba al otro lado del charco y hasta cambié de continente mas de una vez.
    Sobre todo insisto, cuando yo me fui de Venezuela y llegué a Canadá para estudiar, sin saber Inglés, me dije que estaba en otro mundo y tenia que aprender de cero, eso fue lo que hice, hasta me casé con una caadiense y me nació una hija en Montreal, y ya puestos, traté de conocer el País todo lo que pude en los años que estuve, luego regresamos a Venezuela y muchos años mas tarde, a España, pero no por regresar aquí sino por trabajo, hubiera ido a cualquier otro país por las mismas razones, yo nunca tuve nostalgia de España.
    Mucho animo guapa, de verdad, de corazón, ahora no hay que mirar atrás.
    Perdona por el rollete pero pienso que te puede venir bien :))
    Con tu permiso le voy a dejar aquí un beso dulce a Blue que me entiende siempre tan bien, :))
    Besos y salud

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    1. Claro que me viene bien, Genín! Aunque no creo que llegue a casarme con un alemán, jaja, aunque nunca se sabe!!! Aunque lo de tener un hijo alemán todavía sería posible, un poco justo, pero posible... Mi madre me mata, eso sí!
      Ahora más en serio... Como verás hoy ya estoy de mejor humor, por suerte los bajones me duran poco porque soy de las tuyas, de las que deciden y miran para delante, nunca hacia atrás, salvo que sea para no cometer los mismos errores. Nostalgia de España no creo que llegue a tener mucha, pero sí de mis padres, ese es mi punto flaco. Sobre todo porque me he marchado en un momento en el que me empiezan a necesitar más, aunque ellos lo entienden perfectamente.
      Muchos besos.

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  6. Son tantas las cosas que te diría, que seria tremendo rollo; por resumir un poco; te digo que comparto totalmente las palabras del chico que nos traes; en mi caso hay similitudes y diferencias; claro esta, pero también me sucede, no soy de Uruguay, no soy de España y sufro por los dos países cuando veo algunas cosas que suceden en ellos; y creo igual que lei por ahí arriba, que una vez sacas un pie, es mucho mas fácil moverte.
    Comparto lo que sentís por la familia y amistades, lógico; pero tenes que pensar en tus hijos, pienso que hiciste muy bien, en el futuro lo veras mas claro, ahora toda esa mezcla de sentimientos no te lo permite, estoy segura de que no te arrepentiras.
    Arreglar España llevara mucho tiempo, y mucho dolor; si podes darles una vida mejor a tus hijos mientras tanto, mucho mejor...
    Yo misma arrancaría ahora mismo....
    Un beso enorrrrme.

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    1. Ay, Cheli! Me quedé con las ganas de tomarnos una caña en Valencia, pero no lo descarto, que lo sepas. A Alicante iré a menudo, y en una de esas me quiero escapar a Valencia, que tengo familia cercana allí, así que ya veremos.
      Te entiendo perfectamente y te agradezco mucho tus comentarios, porque lo que más me ha movido han sido precisamente mis hijos, y veo que en apenas dos semanas el mayor está ya feliz y muy integrado. Al fin y al cabo, esto es Europa y no somos tan diferentes...
      Un beso fuerte.

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  7. Por supuesto, ni bien te des una vuelta por aca me avisas, y le damos a la cañita o un buen "relaxin cup of café con leche"!!!

    Ya ves, para los peques es incluso mas fácil.
    Ven mundo, ven que hay algo mas que la corrupción y todo esto que nos esta ahogando ahora mismo...
    En cuanto puedas contanos tus aventuras!!
    Besos.

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  8. He leído por ahí que hay demasiada gente en Alemania con minijobs, y por tanto, que tampoco es una maravilla ir a trabajar allí. Incluso para los que tienen estudios superiores y que emigran allí también les pagan poco....no se...ya dirás. Tengo un compañero de clase que se fue de Erasmus para allá...a ver si me contesta y os cuento algo. Lakacerola.

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    1. Lakacerola, ya os contaré. Quiero poner un día una recopilación de enlaces interesantes con mucha información sobre el país, que a mí me vinieron muy bien a la hora de decidir dónde ir. Por todo lo que he leído y me han podido contar, los sueldos que son más bajos (excluyendo minijobs) son los empleos menos cualificados, como camarero sin experiencia o dependiente, por ejemplo, que pueden ser unos 1000 euros. Eso te permite vivir en un piso compartido, o en pareja si los dos trabajan. Los minijobs suelen ser más para gente que busca un complemento a sus ingresos o una ocupación de pocas horas (como mujeres con hijos pequeños), o para estudiantes, por ejemplo. Si no me equivoco, son 15 horas a la semana por 400 euros al mes libres de impuestos y sin seguridad social.
      La realidad para mí, por desgracia, es que hasta eso sería una maravilla en España hoy por hoy tal y como están las cosas.
      Prometo ir contando cosas en cuanto me estabilice un poco :).
      Besos!

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  9. Hola, Su:
    Ante todo creo que te felicito por haber dado ya el salto. Creo que no tardarás en adaptarte. Y estoy de acuerdo con lo que reflexiona ese emigrante que citas. .. Podríamos resumirlo así: En todas partes cuecen habas, pero en unos lugares basta una modesta tartera, en otros no llega un marmitón. Y el problema de adaptarse no es tanto familiarizarse y compartir las virtudes esenciales de la sociedad en cuestión como tolerar lo que un alemán gracioso llamó las virtudes secundarias alemanas, que son en buena parte las culpables de los pasos que dieron para desencadenar las guerras del XX y sobreviven en forma de fundamentalismo sobre la deuda en estos días. ...
    No puedo presumir de conocerlos en profundidad porque mis estancias allí fueron de tiempo limitado .. por eso me adapté muy bien a sus virtudes esenciales ... y pude obviar esas virtudes secundarias.

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    1. Euclides, gracias. Yo también creo que me voy a adaptar bien, yo te diría incluso que muy bien. Aunque soy muy española en cuanto a flexibilidad y capacidad de improvisación (algo que los alemanes odian y a la vez algunos admiran), soy muy germánica en cuanto a la planificación (ese es mi lado más "ingenieril"). En conjunto yo creo que encajaré, ya os contaré. Y en cuanto a las "virtudes secundarias", como bien dices en todas partes cuecen habas, y en España tenemos unas cuantas de esas también, por desgracia...
      Besos.

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  10. Valiente, que eres una valiente! Emigrar y adaptarse no tendría por qué implicar perder el criterio de lo que a uno le gusta o no, sea typical spanish o no. Todo tiene su precio, pero seguro que es más asumible que el de soportar la que nos está cayendo por aquí. Te envidio por tener los huevos de escapar y por hacerlo tan estupendamente. Mucha suerte y muchos ánimos!

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    1. Rita, gracias, me voy a poner "colorá". A ver... un poco valiente hay que ser, sí, porque cuando tomas la decisión y empiezas a preparararte la verdad es que da un poco de vértigo. De todos modos, en mi caso algo muy importante a mi favor y es que ya me podía comunicar en alemán, aunque fuera regular-mal, y en inglés me apaño bien. Y eso ayuda muchísimo. Y otra cosa imprescindible para que la decisión no cueste mucho, es sentirte bien en tu propia casa (y "en tu piel", como dicen los franceses), y por supuesto estar muy bien con tu pareja. Yo eso lo tenía, y me está haciendo mucho más fácil el camino.
      Besos y gracias!

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